Por Alfonso Parra
Cruz Azul es un auténtico invitado en el Estadio Olímpico Universitario y será su casa en el futuro inmediato. Pero, en su primer partido, ya se desató la polémica con Pumas.
La "Máquina", local nominal en su debut de la jornada 1 contra Atlas, taparon un escudo de los Pumas con una manta y el logo de Cruz Azul. Algo que molestó a la afición y ciertamente, a la institución.
Así que, Pumas para evitar que vuelva a suceder lo que algunos califican como falta de respeto, le dio una lista a Cruz Azul con cosas que no puede hacer en su estadía en el Olímpico Universitario.
Es una pequeña lista de cinco puntos, pero que Cruz Azul debe seguir a la perfección para no meterse en broncas, porque las opciones de jugar como local se le agotan en la Ciudad de México.
Primero, no se puede tapar el escudo de Pumas en la entrada de maratón. Dos, el cintillo con los escudos de Pumas que dividen planta alta y baja no se pueden tapar. Tres, no habrá banderas de Pumas en las astas que rodean el estadio cuando juegue Cruz Azul. Cuatro, se pueden tapar con camisetas los asientos de las bancas que traen el logotipo de Pumas. Cinco, en el vestidor se puede modificar todo, siempre y cuando regresen todo a la normalidad al finalizar el juego.
Así que, la directiva de Cruz Azul ya sabe lo que sí tiene permitido en CU y lo que está altamente prohibido. Todo sea porque los dueños de su nuevo hogar, no se molesten.
La mudanza de Cruz Azul al Estadio Olímpico Universitario en el Clausura 2025 marcó un hito inesperado en la historia del club. Compartir casa con los Pumas de la UNAM, un rival histórico y con una identidad universitaria tan arraigada, generó gran controversia y debate entre los aficionados de ambos equipos.
La decisión de Cruz Azul de abandonar el Estadio Azteca y posteriormente el Estadio Azul para mudarse a Ciudad Universitaria fue motivada por diversos factores, entre ellos la remodelación del Coloso de Santa Úrsula y la búsqueda de un nuevo hogar que les permitiera seguir siendo competitivos.
Compartir el Estadio Olímpico Universitario con los Pumas significó para Cruz Azul un nuevo comienzo, además de la oportunidad de reescribir su historia en un nuevo escenario
Enfrentar la tarea de hacer sentir su casa en un estadio con una identidad tan arraigada a otro equipo y la posibilidad de expandir su base de aficionados y consolidarse como uno de los equipos más importantes del fútbol mexicano.
La llegada de Cruz Azul a Ciudad Universitaria no estuvo exenta de polémica. La afición de Pumas mostró su rechazo a compartir su estadio con un rival histórico, argumentando que se estaba atentando contra la identidad universitaria del inmueble. Por su parte, los aficionados de Cruz Azul expresaron su malestar por tener que jugar en un estadio que no sentían como propio.
A pesar de las críticas, Cruz Azul realizó algunas modificaciones en el estadio para tratar de hacer sentir más como local a su afición, como la colocación de lonas con los colores del equipo y la instalación de inflatables con el escudo. Sin embargo, estas acciones no fueron suficientes para calmar los ánimos de los aficionados de Pumas.
Adaptarse a un nuevo estadio siempre es un desafío para cualquier equipo. Cruz Azul tuvo que enfrentar varios retos en Ciudad Universitaria:
La convivencia con la afición rival generó un ambiente tenso en los partidos, lo que pudo afectar el estado anímico del equipo. Otro reto es adaptarse a las dimensiones del campo ya que el Estadio Olímpico Universitario tiene unas dimensiones diferentes al Estadio Azteca.
14/01/2025
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